Todo esto se puede resumir en una palabra: ahora.
El ahora no puede andar solo.
Ahora estás,
ahora escapas,
ahora sufres,
ahora lloras,
ahora ríes,
ahora piensas,
ahora mides,
ahora suspiras,
ahora gimes,
ahora.
El ahora no abandona.
Sé que el ahora cerrará mis ojos cuando se me desborde este mar.
Ahora no promete porque no sabe durar.
Ahora jura que él nunca fue el mismo.
Ahora se desliza, no tiene garras.
Ahora me encuentra.
Ahora es dentro de mí.
¡Maravillosa poesía!. Me parece digna de antología. La he leído varias veces de lo que me ha gustado. La que más me ha gustado hasta ahora.