Yo tenía una luz,
Un destello en la pupila,
Un faro de papel.
Yo nunca tuve sueños,
Solo pies alados por tierra
Y una sonrisa.
Yo, un beso vacío
Como el del último día,
Desaliento de mar.
Yo, y mi inocencia
Se unen en cada abrazo
Que tú me regalas.
Yo tenía hábitos,
Ahora me cubro con tu piel
Del frío o calor.
Yo, porque la unidad
Es la certeza en soledad
De todos mis después.
Yo, y mi compañero
Lo serás tú hasta que quieras.
Ya soy anónima.
¡Puf! Precioso poema…