Soy dos bolsos colgados junto a la ventana, un pendiente suelto sobre la mesilla, la mitad de una foto, un mapamundi con chinchetas, cajas llenas a la espera de algún día estar vacías. Soy una capa de polvo sobre los muebles, el olor de unas sábanas, el desorden tras las puertas. Soy una serpiente a punto de mudar. Esta tierra ya se enfrió.
Mes: septiembre 2013
Sin permiso
Miré al cielo
para comerme la luz
que llovía sin permiso.
Desnuda de ecos
por fin, abrí mi alma
a una verdad cualquiera.
La nube mentía,
poderosa en su reino,
de corazón a pez pájaro.
Solo esta vez,
no me niegues la foto,
el momento sublime y leve.
Buscando la sonrisa
Llevo días buscando la sonrisa.
Entre las sábanas restos de sexo fresco,
las tragedias urbanas sobre la brisa mojada.
Desclavo de la pared mis pupilas,
cuelgo mi futuro justo ahí, ardiendo,
para que ningún ladrón ose jamás llevárselo.
Camino abajo y arriba y
el rumbo es mi sabia, tosca indecisión.
Nadie sigue a una loca que sabe donde va.
Entre adoquines, flores marchitas,
con polen seco estornudaré ahoras
que serán pasado en cuanto gire y me pierda.
El espejo vocea: «¡Ven, deprisa!
Encontré la sonrisa, tu risa, tu vida.
Asómate. Abre tu mano, acepta el regalo.»
Hechos
Hechos, dadme palabras.
Estoy sola ante vosotros,
dueños de vuestro destino y del mío.
Salida, muéstrame tu puerta.
Traigo el alma cansada
de merodear esta casa sin ventanas.
Viento, invítame a tu hogar.
Llevo alas inmaculadas,
amantes del sol y de la lluvia nuevas.
Navegante, súrcame la vida.
Abandono un silencio atroz
en cada puerto que no me ilumina.
Luna, escóndeme tu verdad.
Cubro mi melena de agua,
me agita cada mirada de mariposa.
En cada fractura, una cima.
En toda alma, la unión.
Hombre y mujer y rosa y espina viva.
Para Arturo Murguia.
Al dente
Hay un calor que derrite las venas,
un amor caliente que nos enreda.
Somos tú y yo.
Al dente.