Esta ciudad constipada
tose y escupe humo con alquitrán.
De ojos azules vidrio,
llora cual ciego vagabundo inmortal.
Su música de pisadas
inquieta el oído virgen de un bebé.
Duele su insomnio vulgar,
queman sus noches sin medida ni final.
La ciudad habla bajito,
congela su eco el trébol por brotar.
No desea epitafio,
solo un lecho de ruinas sin masticar.
Etiqueta: eco
La ola
¿Sabe la ola que es poesía para el mar?
Cada espuma, un susurro.
Cada embestida, un nuevo final.
¿Sabe la ola que su viaje es eterno?
Hacia un nirvana húmedo.
Hasta el osario de horizontes.
¿Sabe la ola que no hay palabras que la contengan?
Que la luna es su brújula,
y que la orilla solo es un eco más.
Día con mar
Sueños sin dientes
Palabras sin eco
La lluvia que espera
Que acabe el asueto
Dulces los ojos
De cacao y almendra
Duermen sin pausa
Se aleja el espejo
Somos un día con mar
Susurro de sirenas
Gozo para las gaviotas
Embate de olas insomnes
Foto sin filtro
Amo, no pido a cambio
Aprendo a amar, no pido más
Hay quienes no saben de soledades
De esos lugares ignotos, mares secos
Oasis de calma, nidos de ramas vivas
Almohadas de abrazo de plumas
Ojos entonando escalas de colores
Pido, un amor transparente
Suplico, gente supurando compasión
Hoy cargué las baterías a mis palabras
Desgastadas de tanto repetirse y su eco
Distorsionado llegará a una generación
Nueva de ilusiones, vieja en el amor
Olvidadiza, tal vez enfermiza de visión
Sobran, piezas en este puzzle
Quedan por hacer, fotos sin filtrar
Perdón
Hoy quiero pedir perdón.
Perdón por todos los abrazos que llegaron con retraso.
Perdón por esta transparencia de cantos afilados.
Perdón por esconder agujas entre las risas.
Perdón por cargarle un pasado ligero a un futuro precoz.
Perdón por mi falta de humildad y mi maldad acolchada.
Perdón por este sorbete de lágrimas de un solo gusto.
Perdón por amar sin manual de instrucciones.
Perdón por la angustia que sembré en los amaneceres.
Perdón por este cansancio sin fecha de caducidad.
Perdón por tropezar sin haber piedras en el camino.
Pido perdón y me responde el eco.
Y me perdona porque es eterno.
Y me perdono por no ser perfecta.
Y le perdono por ser el mayor de los dones.