Nunca duermo sola

Nunca duermo sola.
Estás tú, que no estás.
Está la distancia que nos abraza.
Se quedó el último suspiro de tus ojos.
Escucharé por siempre tu silencio azul sobre mi almohada.

Estás tú en mí.
Te respiro en el horizonte.
Nunca sueño sola.

Share Button

Sin sueños

Nunca tuve sueños,
hasta ahora me alimenté
de todas las sonrisas fugaces.

Estás vacía, me decía.
Estás llena de nada.
Sabes que estás muerta por dentro.

Es desidia, es pereza,
es orgullo, es error.
Sublime en mi inhumanidad.

Cansa nadar lento
contra la corriente.
Cansa luchar y no llegar nunca.

Yo nado al centro
del mar inmenso.
Ondas en el horizonte azul.

Share Button

Juego de sábanas

A la deriva somos olas blancas,
ante el inmenso mar de una mirada,
bajo el roce leve de tu carne seda.

Cabe tu beso se encuentra la pasión,
con las manos te templo el alma,
contra el tiempo pierdo mi sexo.

De nuevo soy reflejo de tus lágrimas,
desde el balcón de tu pelo caigo
en la marea furiosa de un abrazo.

Entre sábanas empezamos el camino
hacia nuevas tierras indómitas,
hasta un horizonte de piel plena.

Para nosotros será siempre un juego,
por la risa, por la vida, por la muerte,
según un evangelio pisoteado.

Sin duda somos aprendices de sombras,
so pena que la noche nos alcance
sobre las ascuas del día, aún bailando.

Tras el alma me postro como sed en llamas.

Share Button

El muelle

El muelle separó la sombra de mi alma,
el mar unió nuestros corazones navegantes,
se hizo el sol de noche, el espejo flotante.

Eran las olas las risas del agua,
fueron los pescadores los magos del océano,
ilusionistas entre la vida y la muerte.

Buscaba el faro amantes que sorprender
en un beso húmedo, en su altar de algas,
buscaba el faro un horizonte de luz.

Share Button

Cenicero de pasiones

El amor se desgasta de tanto tironear la pasión
De medir cómo crecen de rápido sus uñas
De moverle las latitudes sin notificación

Cuida mi alma y te regalo un beso imborrable
Rojo, solitario, digno de un rey vagabundo
Solo quedará de mí un hambre insaciable

Toda música se crea en oídos ajenos
Todo amor es barro, arcilla de divinidades
Amorfo cenicero de pasiones y celos

Te deseo vida después de que apagues
La soledad infinita que hoy es tu colchón
Mañana será horizonte de muchas muertes

A Gustavo Cerati

Share Button