Hoy descubrí que el ruido
es el arrullo del silencio.
Que las prisas son el mejor
abono para nuestras raíces.
Aprendí la vulnerabilidad
que nos hermana con las flores.
Que el agua es la sed pura
de la nube en mi puerta.
Hoy supe que los muros de piel
son los más difíciles de derrumbar.
Que los árboles tienen cosquillas
y los besos no dados pesan más.
Precioso!
Muchas gracias 🙂